Sangrado Nasal en Perros: ¿Qué Hacer si a Tu Can Le Sangra la Nariz?

que pasa si a mi perro le sangra la nariz

Si estás leyendo esto, es probable que te encuentres preocupado porque has detectado sangrado nasal en tu perro. Aquí encontrarás información valiosa sobre las posibles causas y las acciones que debes tomar ante esta alarmante situación.

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Causas Comunes del Sangrado Nasal en Perros

El sangrado nasal en perros, conocido también como epistaxis, puede ser un síntoma de diversas condiciones. Aquí te enumeramos las causas más comunes:

  • Traumatismos: Un golpe en la zona del hocico puede provocar sangrado.
  • Objetos extraños: Los perros son curiosos y pueden introducirse objetos que causen lesiones internas.
  • Enfermedades dentales: Problemas como gingivitis o periodontitis pueden causar sangrado que se extiende hasta la nariz.
  • Tumores: Algunos crecimientos benignos o malignos pueden manifestarse con epistaxis.
  • Enfermedades sistémicas: Ciertos trastornos como la enfermedad de von Willebrand u otras alteraciones de la coagulación pueden ser culpables.

Primeros Auxilios para el Sangrado Nasal Canino



Cuando notes que a tu perro le sangra la nariz, es importante mantener la calma y seguir estos pasos:

  1. Mantén la calma: Tu perro puede estar asustado, y necesita sentirte tranquilo.
  2. Revisa la nariz: Intenta identificar si hay un objeto visible sin introducir nada en las fosas nasales.
  3. Aplica frío: Colocar una compresa fría puede ayudar a disminuir el sangrado.
  4. Lleva a tu perro al veterinario: Es fundamental un chequeo profesional para determinar la causa del sangrado.

Cuándo es Urgente Visitar al Veterinario

Existen situaciones en las que el sangrado nasal es una señal de emergencia. No debes perder tiempo si tu perro presenta alguno de los siguientes síntomas:

  • Sangrado abundante: Si el sangrado es continuo y no cesa.
  • Sangrado de ambas fosas nasales: Esto puede indicar una causa más grave subyacente.
  • Dificultad para respirar: Si tu perro muestra esfuerzo o ruido al respirar.
  • Signos de dolor: Gritos, aullidos o cualquier comportamiento que indique molestia.
  • Presencia de otros síntomas: Como letargo, fiebre o cambios en el comportamiento.

Ante el sangrado nasal de tu perro, actuar rápido y consultar con tu veterinario es siempre la mejor opción. Si la preocupación por la salud de tu mascota te ha traído hasta aquí, continúa informándote; en los artículos relacionados de abajo podrás profundizar más sobre este y otros temas de interés para el cuidado de tu compañero de cuatro patas. ¡No te los pierdas!

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