Peligros de la Lejía para Perros: Qué Hacer si tu Can Ingiere Agua con Cloro

que pasa si mi perro toma agua con lejia

Si tienes un perro en casa, su seguridad y bienestar son siempre una prioridad. Por eso, comprender los riesgos de productos comunes como la lejía es esencial. En este artículo, vamos a explorar qué consecuencias tiene para un can el ingerir agua con lejía y qué medidas debes tomar al respecto.

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Peligros de la ingestión de lejía por perros

La lejía es un producto de limpieza doméstico común, valorado por su capacidad de desinfección. Sin embargo, su naturaleza corrosiva lo convierte en un peligro significativo para los perros, pudiendo causar daños en la boca, el esófago y el estómago, con síntomas que pueden incluir vómitos, salivación excesiva y dolor abdominal.

  • Vómito
  • Salivación excesiva
  • Dolor abdominal
  • Depresión

Primeros auxilios en caso de ingestión

Si sospechas que tu perro ha ingerido lejía, actúa rápidamente. Primero, quita cualquier resto de lejía de su alcance. No le induzcas el vómito ni le des nada por boca sin consultarlo antes con un profesional, ya que esto podría agravar la situación.

Actuación inmediata si tu perro ingiere lejía

Lleva a tu perro al veterinario de inmediato. Un profesional es quien mejor puede evaluar la gravedad de la situación y proporcionar el tratamiento adecuado para minimizar los daños y estabilizar la salud de tu mascota. Mientras lo transportas, trata de mantenerlo calmado y cómodo.


Tratamiento veterinario para la intoxicación con lejía

El veterinario realizará un examen completo y, según la severidad, puede necesitar hacer análisis de sangre, endoscopias o prescribir tratamientos específicos para proteger el estómago y el esófago del perro. La rapidez en la atención es crucial para el pronóstico.

Prevención de accidentes con lejía y otros tóxicos

Para evitar que estos incidentes ocurran en primer lugar, mantén los productos de limpieza fuera del alcance de tu mascota. Guarda la lejía y otros químicos en armarios altos o con seguros, y asegúrate de que las tapas estén bien cerradas.

  1. Almacena la lejía en lugares inaccesibles.
  2. Usa seguros en armarios.
  3. Mantén los químicos bien cerrados.

Educación y concienciación sobre tóxicos en el hogar

Es importante educar a todos los miembros de la casa, especialmente a los niños, sobre los riesgos de la lejía y otros productos tóxicos. Una buena comunicación puede prevenir muchos accidentes.

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